Cómo reducir el estrés de los niños después del verano
Empezar el curso de nuevo puede ser un momento muy estresante tanto para los niños como para los padres. Nuevos compañeros, nuevos profesores, nuevas normas… ¿Cómo se puede lidiar con el estrés de los niños después del verano?
Parece difícil sobrellevar estas épocas tan estresantes. Sin embargo, con un poco de preparación y una buena actitud, pasar del relax del verano a la vuelta a la rutina del cole no tiene por qué resultar tan difícil.
¿Cómo gestionar el estrés de los niños después del verano?
La vuelta al cole puede hacerse cuesta arriba, pero los padres podemos echar una mano para que los niños puedan sobrellevar todo el estrés que este cambio conlleva. Te dejamos algunos consejos para aliviar el estrés de los más pequeños y ayudarles a establecer una rutina de nuevo después de meses de descanso:
Hazlo especial
Sobre todo para los niños más pequeños, incluir una nota especial en su mochila o incluso una foto familiar puede ser de gran ayuda en su primer día. Incluso si lo mantienes con los días, les hará sentir que estás cerca en esta época de cambio.
Tradiciones divertidas
Antes de que empiece el colegio o durante los primeros días, puede hacerse algo divertido para distraer a los pequeños. Una actividad que les interese justo antes de empezar las clases o un desayuno especial los primeros días de colegio puede hacer que esperen con ansias el momento de volver a la rutina y, con todo, ello, se disipe el estrés.
Positividad, ante todo
Si los padres muestran entusiasmo por lo que el nuevo curso traer consigo, los hijos lo captarán y el estrés puede llegar a convertirse en emoción. ¡Es importante que no vean el estrés en ti!
Hablad sobre ello
Pregunta a tus hijos qué les preocupa si parecen estresados tras el primer día de colegio. Podéis hablar sobre las cosas divertidas y emocionantes que pueden pasar durante el curso escolar.
Programa
Antes de que empiece el curso, empieza a despertar a tus hijos a la hora a la que deberían levantarse para ir al colegio. Puedes ir poco a poco: un día despertarles más pronto, al día siguiente acostarse antes… Empezar con la rutina antes de tiempo hará que se vayan acostumbrando y, cuando llegue el día, la vuelta a la rutina sea mucho más liviana.
Mantente involucrado con lo que hagan en el colegio
Tener una comunicación regular con los profesores, sobre todo con los tutores, puede ser clave para saber cuando los niños pueden sufrir períodos de mayor estrés. Es importante mantenerse al tanto de como le va al niño académica, social y conductualmente.
Organizarse
Algo que también resulta clave a la hora de evitar el estrés en los niños cuando empieza la rutina es establecer un calendario familiar en el que todas las actividades y las fechas de vencimiento de tareas importantes sean fáciles de recordar.
También es buena idea preparar las mochilas y la ropa para la escuela la noche anterior, organizar los libros y el material escolar en los estantes, cajones o cajas, organizar todos los trámites por orden de prioridad y hacer una lista única de todas las tareas que deben completar cada día.
En concreto, es importante planificar la carga de tareas. Haz un plan de donde y cuando se harán los deberes. ¿Disponéis de un escritorio que usa el pequeño o bien hace los deberes en la mesa del salón? Ceñirnos a un horario será de gran ayuda para reducir el estrés.
Escucha activa
Si ves al pequeño estresado por el colegio, el primer paso es escuchar lo que le está pasando. Incluso si no está hablando, es importante estar atentos a las señales no verbales. Puedes empezar la conversación preguntando casualmente sobre el colegio mientras conducís a casa, en el supermercado o haciendo una tarea en casa juntos. Abstente de presionarle para obtener respuestas: ¡no servirá para nada!
