Cómo ventilar tu dormitorio en invierno

Feb 19, 2023 | CONSEJOS, DORMITORIO | 0 Comentarios

Ventilar tu dormitorio es algo necesario que tenemos que hacer todos los días. Una ventilación correcta del hogar es un hábito realmente positivo para la salud, ya que a veces podemos almacenar más nivel de contaminación dentro de las viviendas que en la propia calle. Pero, ¿cómo ventilar una habitación en invierno? ¿Qué hacer cuando ahí fuera el termómetro marca la temperatura más baja de todo el año?

6 maneras de ventilar las habitaciones durante el invierno (sin congelarnos en el intento)

El paso de las horas y las actividades que hacemos en nuestro hogar provoca una acumulación de toxinas en el ambiente: las humedades, los gases provocados por la calefacción, los ambientadores, el humo de los cigarros, el cocinado de alimentos…

Todas las causas anteriores provocan que cada mañana tengamos que abrir las ventanas para ventilar la casa. Una renovación completa y necesaria del aire que puede generar mayor pereza durante el invierno. Y es que la bajada de temperaturas no facilita esta acción si, además, vamos a permanecer en la casa. Por ello, es importante que sigamos estas recomendaciones para poder ventilar el dormitorio en invierno sin congelarnos en el intento.

1. No es obligatorio ventilar la habitación nada más levantarte

Tenemos la creencia popular (o la costumbre adquirida) de abrir las ventanas en cuanto nos despertamos y salimos de la cama. Este hábito está genial si ahí fuera los termómetros superan los 20 grados, pero ventilar la habitación a las 8 de la mañana de un helado día de enero no es nada saludable para nosotros si aún estamos en casa. Elige bien el momento en el que vas a ventilar las habitaciones. Por ejemplo, al mediodía, cuando la temperatura aumenta.

2. Ventila habitación por habitación

Una manera de ventilar las diferentes estancias durante el invierno y no pasar frío es hacerlo de manera individual. Abriendo las ventanas y cerrando las puertas nos permitirá ventilar toda la casa sin pasar frío. De esta manera, evitamos que se produzca una especie de corriente general. Haciéndolo dormitorio por dormitorio nos permitirá permanecer en la habitación que aún no estamos ventilando y no pasar frío.

3. Genera una corriente en toda la casa

Igual que no te recomendamos ventilar todas las habitaciones a la vez si vas a permanecer en la casa, lo más recomendable si vas a salir es aprovechar ese momento y abrir todas las ventanas a la vez. Esta purificación completa y general del hogar es perfecta si, por ejemplo, vas a aprovechar para bajar a la panadería o hacer un recado que no te lleve más de 15 ó 20 minutos. También es recomendable seguir este consejo en el momento más cálido del día.

4. Reduce el uso de aerosoles dentro de tu hogar

Además de recalcar la importancia de abrir todas las ventanas y ventilar durante 15 minutos tu hogar, también podemos liberarlo de toxinas si hacemos un uso responsable de nuestras actividades cotidianas. Es decir, reducir el uso de aerosoles, no fumar en casa, usar el extractor cada vez que cocinamos (y abrir la ventana de la cocina) o no utilizar incienso en habitaciones cerradas. Estos pequeños hábitos nos ayudarán a reducir el nivel de toxinas y contaminación en el ambiente y, por el contrario, mantener un aire más limpio y fácil de renovar.

5. Instala un filtro de aire o, en su defecto, un deshumidificador

Por último, la recomendación más premium y profesional de todas. Aunque nos puede valer con la ventilación diaria de la casa, hay veces que el frío invierno no facilita las cosas. El típico domingo en el que no vamos a salir de casa no pone nada fácil el hecho de abrir las ventanas. Por eso, podemos ayudarnos de aparatos externos y elementos como deshumidificadores o filtros de aire. Estas opciones suponen una inversión económica, pero son tremendamente válidas en ciudades y pueblos más fríos. La instalación de un aparato deshumidificador ayudará a eliminar todo ese exceso de humedad que se mantiene en el ambiente, así como la expulsión de gases y toxinas en el aire de la casa.