Los hombres son los que más roncan

Oct 23, 2019 | TRASTORNOS DEL SUEÑO

Nadie reconoce que ronca y los hombres roncan más que las mujeres. Son dos frases que se dan por ciertas. La primera es fácilmente demostrable, principalmente porque cuando se ronca, se está durmiendo y así es imposible saberlo. Sin embargo, la segunda no tiene tan fácil explicación. En este artículo veremos por qué los hombres roncan más que las mujeres y cuáles son los principales factores que hacen que esta frase sea cierta, además se indicarán algunos consejos para reducir la intensidad y frecuencia de los ronquidos.

Por qué roncamos cuando dormimos

Cuando dormimos, los músculos tanto de la garganta como de la tráquea se relajan y la lengua se desliza un poco hacia atrás. Si a esto, unimos que se duerme boca arriba forzando la respiración por la boca, el resultado es que se reduce el espacio para la entrada de aire al respirar. El aire pasa por ese pequeño espacio, vibrando y produciendo los molestos ronquidos. Los ronquidos pueden afectar a la convivencia, resultando muy molestos para las personas que comparten cama con otras que roncan. Además, roncar suele ir ligado a algún problema o deficiencia, que es síntoma de no tener unos hábitos de vida saludables. Hay estudios que indican que el 65% de los hombres y el 34% de las mujeres roncan de manera habitual.

 ¿Los hombres roncan más que las mujeres?

Los hombres tienden a roncar más que las mujeres ya que hay muchos factores que propician los ronquidos que les afectan más a ellos, que a ellas. No hay un único motivo por el cual los hombres roncan más que las mujeres, ya que hay múltiples causas que provocan el ronquido y que están asociados a los hombres.

Factores que hacen que los hombres ronquen más que las mujeres

l Estrógenos. Los estrógenos hacen que el cuello se relaje durante el sueño, por lo tanto, los hombres no relajan tanto el cuello como lo hacen las mujeres mientras duermen, teniendo más tendencia al ronquido por esta causa. Durante la menopausia, las mujeres disminuyen el estrógeno que generan y ven aumentados sus ronquidos.

l Cavidad bucal y cuerdas vocales más grandes. Los hombres disponen de una cavidad bucal y cuerdas vocales más grandes. Ambas, se relajan durante el sueño, lo que amplifica la vibración, aumentando el volumen del ronquido.

l Estilo de vida. Dos factores que afectan directamente al ronquido son el consumo de alcohol y el tabaco. Aunque hoy en día, las cosas se están equiparando, normalmente los hombres tienden a fumar y beber más alcohol que las mujeres.

l Obesidad. La obesidad es uno de los factores fundamentales a la hora de roncar. Tener un grado alto de grasa corporal hace que se reduzca la vía de entrada de aire, ya que la grasa se acumula en la faringe, produciendo que durante el sueño se dificulte la respiración y propiciando los ronquidos. Un cuello graso, además, comprime la garganta. l Desviación del tabique nasal. La desviación del tabique nasal hace que la estructura de separación de las fosas nasales afecte a la respiración durante el sueño, provocando que se respire por la boca. Las deformaciones nasales suelen estar muy ligadas a la práctica de deportes de contacto, y generalmente los hombres practican más este tipo de deportes que las mujeres (aunque afortunadamente la tendencia actual es que esta circunstancia se equipare). Un resfriado u otra enfermedad que dificulte la respiración nasal, también puede provocar la aparición de ronquidos.

Cómo reducir los ronquidos

Es posible reducir los ronquidos teniendo en cuenta los factores que los causan, e intentando poner remedio a los mismos. Perder peso, no fumar ni beber alcohol, dormir de lado, ayuda a disminuir los ronquidos.

La utilización de almohadas adecuadas, que se adapten a la curva cervical y a los movimientos que se realizan mientras se duerme, ayuda a evitar posturas que son más proclives a producir ronquidos.

Los hombres roncan más que las mujeres porque cumplen muchos de los factores que afectan al ronquido. Desde causas genéticas, como los estrógenos o el tamaño de cuerdas vocales y cavidad bucal, hasta hábitos de vida.

Tomando las medidas oportunas, se puede reducir la frecuencia e intensidad de los ronquidos consiguiendo que el cuerpo descanse mejor durante las horas de sueño, y evitando molestar o despertar a la pareja.