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La temporada de verano trae consigo un cambio en la forma de vestir la cama en verano. Para disfrutar de un descanso reparador, incluso en las noches más calurosas, es esencial adaptar los elementos de la cama a las temperaturas y condiciones ambientales.
Como en Maxcolchon sabemos lo importante que es optimizar el confort del dormitorio en todas las estaciones, te mostramos las mejores recomendaciones para vestir la cama en verano, manteniendo siempre la frescura y el bienestar como prioridad.
Los días se van alargando y las temperaturas empiezan a ser muy agradables. Es hora de cambiar edredones y mantas y vestir nuestras camas con tejidos que aporten frescura y transpirabilidad. Si quieres tener lista la habitación para que el verano no te pille desprevenido, te dejamos algunas ideas para conseguirlo.
La elección de materiales frescos es fundamental para evitar el exceso de calor. Las fibras naturales como el algodón o el lino son idóneas para el verano. Hablamos de tejidos cuyas propiedades de transpiración y ventilación permiten mantener una temperatura óptima en la cama.
Siguiendo esta premisa, en Maxcolchon ofrecemos ropa de cama de alta calidad confeccionada en fibras naturales, garantizando una textura suave y un descanso confortable. Y es que las fibras naturales son ideales para vestir la cama en verano y absorber la humedad, evitando que el calor corporal se acumule.
Permitir la entrada de corrientes de aire en el dormitorio ayuda a reducir la temperatura y a mantener el ambiente renovado. Abrir ventanas estratégicamente por la mañana y por la noche puede mejorar la ventilación y favorecer la circulación del aire. Si las condiciones de la zona permiten mantener las ventanas abiertas, esta práctica contribuye a disminuir la sensación térmica, manteniendo la ropa de cama fresca. Para obtener el máximo beneficio, asegúrate de que el aire fluya sin obstáculos.
La ropa de cama en verano no solo se trata de frescura, también de estética. Elegir estampados florales y veraniegos puede transformar la atmósfera del dormitorio, aportando un toque visual refrescante. Los colores y estampados inspirados en la naturaleza, como hojas, flores y diseños tropicales, dan una sensación de frescura y vitalidad que ayuda a relajar la mente antes de dormir.
Para vestir la cama en verano, el color de las sábanas o colchas estivales también influyen en la temperatura y en la percepción de frescura. Y es que, los tonos claros, especialmente el blanco, tienen la capacidad de reflejar la luz, evitando que el calor se acumule.
En definitiva, los colores claros, como los tonos pastel o el beige, son opciones ideales para el verano, ya que proyectan una imagen de frescura y tranquilidad. Y todas estas versiones las encontrarás en nuestro catálogo.
Si hay una época en la que debemos acertar con los tejidos, es el verano. ¿Por qué? Porque han de remar a favor de la transpiración. En este sentido, materiales como el algodón y el lino tienen fibras abiertas que permiten la circulación del aire, lo cual previene la acumulación de calor y humedad.
Vestir la cama en verano implica reducir las capas al mínimo para mantener la frescura en las noches cálidas. En lugar de utilizar una funda gruesa, opta por sábanas ligeras y una colcha delgada. Estos elementos ligeros y frescos son ideales para cubrir la cama sin retener calor, permitiendo un descanso más ligero y agradable.
Estas alternativas mejoran la ventilación y reducen la sensación de peso sobre el cuerpo, lo cual es esencial para disfrutar de un sueño cómodo y reparador durante la temporada estival.
Aunque depende de la zona donde vivas, tal vez tengas que recurrir a los ventiladores de techo si la temperatura del dormitorio es demasiado elevada. Se ha comprobado que para obtener un descanso de calidad es mejor que el ambiente no esté demasiado caldeado.
Para evitarlo, siempre es conveniente airear la habitación por la mañana. Eso sí, si está orientada al oeste, intenta bajar las persianas y evitar que el sol caliente la habitación durante la tarde a no ser que quieras dormir en un “horno”. Normalmente, cuando hace mucho calor, cuesta conciliar el sueño. Por ese motivo, puede ser una buena idea encenderlo antes de acostarnos y dejarlo en funcionamiento durante un rato.
Un toque final para vestir la cama en verano también pasa por la inclusión de aromas refrescantes en el propio dormitorio. Las esencias de lavanda, menta o eucalipto pueden crear una atmósfera relajante y, al mismo tiempo, refrescante. Colocar unas gotas de aceite esencial en la almohada o utilizar un difusor antes de dormir puede contribuir a mejorar la calidad del sueño.
Para vestir adecuadamente la cama en verano, es fundamental seleccionar cada elemento con cuidado.
Los tonos suaves son fundamentales en la temporada de verano. Se recomiendan los tonos claros o pastel. ¿Por qué? Porque ayudan a reflejar la luz y evitan que el calor se concentre en la cama. Además, los colores claros aportan una estética relajante y acogedora al dormitorio.
El colchón es fundamental para el confort en verano, y lo ideal es optar por modelos que faciliten la ventilación y regulen la temperatura. Los colchones de espuma viscoelástica, muelles ensacados o espumas transpirables destacan por su frescura, ya que evitan la acumulación de calor. En Maxcolchon, encontrarás opciones diseñadas para mantener el cuerpo fresco y seco, asegurando un descanso reparador incluso en las noches más calurosas.
En Maxcolchon ofrecemos toppers de materiales transpirables que optimizan el flujo de aire en la cama, proporcionando una capa adicional de confort y frescura.
Una colcha ligera y transpirable es ideal para vestir la cama en verano sin añadir calor. Optar por colchas elaboradas en materiales frescos, como algodón o lino, permite mantener la cama ventilada y cómoda durante las noches cálidas. Además, los diseños veraniegos aportan un toque estético que realza el ambiente del dormitorio.
Un somier que permita la ventilación es clave para una cama fresca en verano. Los modelos de somier con diseño de láminas abiertas facilitan la circulación del aire y el soporte adecuado del colchón, contribuyendo a mantener una temperatura agradable durante las noches calurosas.
Para vestir la cama en verano, las sábanas de algodón o lino son la opción ideal. Estos materiales permiten que la piel respire y reducen la acumulación de calor, lo cual es fundamental para mantener la frescura en noches de altas temperaturas. Elegir sábanas frescas y transpirables mejora notablemente el confort y contribuye a un descanso más reparador.
La elección de la almohada también puede afectar la frescura en verano. Una almohada con materiales que transpiren y que permitan el flujo de aire es ideal para mantener la cabeza fresca y reducir la sudoración. Maxcolchon dispone de almohadas diseñadas especialmente para el verano, garantizando un soporte y frescura óptimos.
En Maxcolchon sabemos que dormir bien en verano es posible. No hay necesidad de pasar noches incómodas cuando se elige bien. Nuestra ropa de cama está pensada para eso: materiales que respiran, tejidos que no pesan y colchones que mantienen la frescura sin esfuerzo. No hay fórmulas mágicas, solo productos diseñados para que descansar en verano sea tan agradable como en cualquier otra época del año.
Nuestro equipo está listo para ayudarte a crear un espacio fresco y cómodo, donde el descanso sea natural, sin esfuerzo.
En Maxcolchon llevamos más de dos décadas dedicándonos a mejorar la calidad del descanso de miles de personas. Nuestro equipo está formado por especialistas en sueño, ergonomía y producto, que trabajan día a día para ofrecer información veraz, práctica y basada en la experiencia real de quienes conocen el descanso por dentro y por fuera.