El descanso de la belleza

Ago 26, 2020 | CONSEJOS, DESCANSO

Jennifer López. Gwyneth Paltrow. Cameron Díaz. Jennifer Aniston. Eva Longoria. Natalia Millán. Juana Acosta. Actrices de Hollywood, pero también españolas, que en numerosas entrevistas han manifestado que el secreto de su belleza está en el descanso. Así de importante es la calidad de nuestro sueño. Una necesidad de las personas que, como puedes observar, no solo va a influir en nuestra salud, también en cómo nos vemos a un nivel más superficial.

Estas son las razones por las que una buena noche de sueño va a influir positivamente en tu rostro

Dormir y descansar bien ayuda a la eliminación de toxinas y a la estimulación de nuestras células

Si los expertos en medicina aconsejan dormir ocho horas al día es porque, de no hacerlo, podemos acabar padeciendo las siguientes patologías: obesidad, diabetes, estrés, ansiedad, depresión, mal funcionamiento del organismo, disminución de la memoria (y enfermedades como Alzheimer) … Y a nivel más superficial, peor estado de ánimo e irritabilidad. Para luchar contra ello y para lograr justo todo lo contrario, provocar el proceso que ayuda a nuestro sistema glinfático (durante el sueño, el líquido cefalorraquídeo bombea alrededor de nuestro cerebro, eliminando así productos de desecho como toxinas), nada mejor que una buena noche reparadora de sueño.

Porque no dormir envejece nuestro rostro

Que las noches en vela envejecen es algo demostrado. Siguiendo patrones parecidos a los del punto anterior, toda aquella célula cerebral que ni descansa ni duerme acaba pereciendo. Esta muerte celular y neurológica, producida por la falta de energía, acaba produciendo una acumulación de neuronas muertas en nuestro cerebro, lo cual acaba repercutiendo a nuestro rostro y, por ende, a la belleza. Tal y como explicó Sigrid Veasey: “las neuronas requieren energía cuando están despiertas y, al generarla, expulsan radicales libres. Durante el sueño, estas unidades se purgan gracias a los antioxidantes que fabrican”.

Dormir menos de lo aconsejado apaga el tono de nuestra piel

Cuando dormimos, no solo lo hace nuestro cerebro. Hasta nuestra propia dermis también lo hace. La renovación celular que se produce cuando dormimos se acelera por la noche, llegando a su clímax cuando llevamos unas cuatro o cinco horas de sueño. Esto se debe a que una hora después de la medianoche es cuando se produce el mayor nivel de segregación de la hormona del crecimiento, la cual influye en la regeneración. Por lo tanto, si la irrigación aumenta cuando estamos descansando, en el caso de dormir poco, este ocurre en menor medida y, por tanto, nuestro tono se apaga, volviéndose más sombrío.

Descansar nos ayuda a recuperarnos de la exposición a la luz del sol

Esas manchas, esa tirantez de la piel o esa sequedad son algunas de las consecuencias de un día de exposición al sol. Dormir bien y hacerlo durante las ocho horas recomendadas ayuda a la piel a recuperarse del eritrema solar (las quemaduras) y a mejorar hasta en un 30% su barrera protectora.

Las temidas ojeras

Es el símbolo del insomnio y casi su logo. Dormir mal o pocas horas promueve la aparición de las ojeras, haciendo tu rostro más cansado aún que tu propia alma. Esto se debe a que, como hemos comentado, una buena noche de sueño hace que tu piel se regenere y se hidrate. Por el contrario, descansar mal lo único que va a provocar es que nuestra piel vea afectada su elasticidad y el mencionado nivel de hidratación. Además, los vasos sanguíneos se pueden dilatar más, haciendo que se vea más a través de la piel, lo cual dará mayor aspecto de cansancio en la zona que tenemos alrededor de los ojos.

Dormir ayuda a luchar contra el sobrepeso

Además de la multi mencionada dieta sana y equilibrada, existe otra acción con la que podemos mantener la silueta. Dormir ayuda a la regulación de dos hormonas que llamamos leptina y ghrelina. Estas aliadas de la belleza son las encargadas de mantener una reserva de grasa correcta. Por ello, cuando padecemos de insomnio o durante un período prolongado de tiempo no dormimos correctamente o lo suficiente, se produce una disfunción en estas dos sustancias. Algo que, obviamente, acaba produciendo obesidad.

El sueño es un enemigo del acné

Además de luchar contra los niveles de estrés producidos por el mal descanso, dormir ocho horas en un buen colchón de viscoelástica ayuda a prevenir el acné. ¿Los motivos? Cuando no descansamos correctamente, nuestra resistencia a la insulina se incrementa, y esta no es otra cosa que una causante del acné de tipo inflamatorio.