Cómo dormir después de una operación

Dic 12, 2020 | CONSEJOS, DESCANSO, PROBLEMAS FISICOS

¿Por qué nos resulta tan complicado dormir después de una operación? ¿Por qué se producen las temidas alteraciones del sueño en los pacientes que han sufrido algún tipo de cirugía? ¿Influye la falta de sueño en nuestra recuperación posoperatoria? Te explicamos todo lo que debes saber sobre cómo descansar después de estos duros percances.

Así dormimos cuando sufrimos una operación

En más de una ocasión hemos explicado la importancia del descanso para mantener una buena salud física y mental. Disponer de una correcta higiene del sueño y seguir una rutina marcada, son puntos importantes que van a desembocar en un mejor estado de ánimo y en un óptimo estado de forma. Sin embargo, existen situaciones contra las que no podemos luchar. Alteraciones del sueño que vienen determinadas por percances por los que tenemos que pasar sí o sí.

Pasar por una operación es duro y complicado per se. Además de las propias molestias previas, el posoperatorio no suele quedarse atrás, ofreciendo también complicaciones en nuestra calidad de vida, hasta el punto de alterar nuestro sueño. Pero, ¿por qué se produce esto?

Factores tan dispares como la edad del paciente, el tipo de anestesia que hemos recibido, la gravedad del trauma quirúrgico, el estrés al que nos ha sometido la operación, el dolor posoperatorio o incluso la evaluación previa a la operación, pueden influir en el tipo de descanso que tendremos después. En definitiva, elementos que confluyen en un mismo problema: alteraciones en nuestro sueño que van a desembocar en una mayor sensibilidad del dolor producido por la propia operación, peor recuperación, problemas cardiovasculares y, por supuesto, peor estado de ánimo.

Según explica la ciencia médica, los durmientes que acaban de sufrir una operación pueden desarrollar alteraciones del sueño tales como: insomnio severo, fragmentación del sueño, disminución de la fase REM mayor nivel de despertares o microdespertares, menor número de horas durmiendo, peor calidad del sueño e incluso un incremento de las pesadillas.

Claves para descansar mejor cuando pasamos por una fase posoperatoria

Si bien es cierto que cada tipo de operación lleva su particular ritmo, recuperación y recomendaciones, si podemos encontrar una serie de puntos generales a los que aferrarnos cuando estamos pasando por una fase posoperatoria.

Siempre y cuando no hayamos recibido algún tipo de recomendación concreta por parte de nuestro cirujano o médico de cabecera (de los cuales siempre debemos de seguir sus instrucciones), lo más aconsejable es dormir boca arriba.

Desde Maxcolchon también aconsejamos adquirir un equipo de descanso acorde a este status por el que estamos pasando. Y aunque puedes pensar que se trata de una situación temporal, estamos hablando de una fase vital de la recuperación de tu físico y, por tanto, de tu salud. Por ello, hacerse con una cama articulada que nos permita asegurar la postura más correcta resultará vital. Además, nos facilitará cualquier movimiento, actividades lúdicas que nos alegrarán el día (desde la lectura hasta el propio visionado de películas con un ordenador o una Tablet) y el propio hecho de salir de la cama.

A esta recomendación le ha de seguir el equipamiento de una almohada cervical, la cual acompañará las prestaciones de la cama articulada con una mayor seguridad y confort del cuello, independientemente del tipo de operación al que hayamos sido sometidos. En definitiva, hacerse con una cama articulada y una almohada cervical no hay que tomarlo con un derroche, sino como una inversión en nuestra propia salud.

Por otra parte, aclimatar nuestro dormitorio para reducir los niveles de estrés ambientales también resultará vital para nuestra propia recuperación. Actos como disminuir la contaminación lumínica, alejar los dispositivos electrónicos, mantener una temperatura cercana a los 22 grados o reducir el nivel de ruidos, ayudará a mejorar la calidad y la eficiencia del sueño. Y si hace falta, ayudarse con tapones para los oídos o un antifaz para los ojos.