Cómo afecta la deficiencia del sueño en el rendimiento académico
Es probable que ya sepas eso de lo importante que resulta dormir bien cada noche. Implícito en ello queda claro que un buen descanso potencia el rendimiento académico y el desarrollo cognitivo.¿Cómo afecta la deficiencia del sueño en el rendimiento académico? Lo vemos a continuación.
Cómo afecta la deficiencia del sueño en el rendimiento académico
Dormir bien es vital para los niños y adolescentes que están experimentando un desarrollo cerebral significativo, tal y como explica la Sleep Foundation. Desafortunadamente, son muchos los estudiantes, tanto de primaria como de secundaria y bachiller, los que no consiguen dormir lo suficiente por las noches.
Al no dormir lo suficiente, los niños y adolescentes pueden tener problemas de memoria, atención y resolución de problemas. Además, la falta de sueño también puede contribuir a que aparezcan problemas emocionales y de comportamiento que pueden acabar afectando al rendimiento académico.
Es por eso que, como padres, resulta clave hacer del sueño una prioridad si queremos que nuestros hijos se desenvuelvan sin problemas en el colegio. Comprender las causas y las consecuencias de la falta de sueño y saber cómo abordarlas puede permitir a los padres ayudar a los niños y adolescentes en sus actividades académicas.
¿Cuál es el efecto de un mal descanso en el rendimiento escolar?
Los expertos en sueño coinciden en que la falta de sueño reduce las capacidades cognitivas y puede perjudicar el rendimiento escolar en niños y adolescentes.
La mayoría de investigaciones sobre la privación del sueño se han llevado a cabo en adultos, pero se cree que muchos de los mismos efectos ocurren en personas más jóvenes. Aunque pocos estudios han examinado la falta de sueño en los niños, según explica la Sleep Foundation, la evidencia existente indica que la falta de sueño puede dañar el rendimiento académico de varias maneras.
Una forma directa de conectar el rendimiento académico y el sueño es a través de los efectos que puede tener la falta de sueño en la función cognitiva. Algunos problemas conocidos y asociados con la falta de sueño incluyen:
Disminución de la atención
La capacidad de concentración es vital para el aprendizaje y el rendimiento académico, pero la falta de sueño reduce la atención y la capacidad para concentrarse.
Creatividad reducida
El pensamiento creativo se basa en poder hacer conexiones entre diversas ideas, y algunas investigaciones han encontrado que este tipo de actividad mental se ve perjudicada por la falta de sueño.
Deterioro de la memoria
El descanso es ese momento en el que nuestro cerebro se encarga de codificar la memoria, cuando el cerebro almacena y fortalece el recuerdo de una imagen o pensamiento. Sin un sueño adecuado, los recuerdos pueden no formarse correctamente y también puede ser más difícil recordar con precisión la información almacenada.
Pensamiento secuencial empeorado
La capacidad de recordar una serie de pasos, como en un experimento científico o al tocar un instrumento musical, se reduce cuando se produce la falta de sueño.
Procesamiento lento
La falta de sueño puede reducir la agudeza, ralentizar el tiempo de reacción y dificultar la capacidad de asimilar y analizar la información rápidamente.
Por si todo esto fuera poco, parece que la falta de sueño también podría afectar al rendimiento académico debido a varios efectos sobre el estado de ánimo y el comportamiento:
Mala toma de decisiones
La falta de sueño puede obstaculizar el desarrollo de las partes del cerebro involucradas en la toma de buenas decisiones, aumentando la probabilidad de tomar decisiones arriesgadas o imprudentes que pueden conducir a problemas disciplinarios en la escuela.
Somnolencia diurna excesiva
La somnolencia durante el día, incluso en la escuela, puede tener consecuencias considerables para el rendimiento académico. Dormir durante unos segundos, algo conocido como microsueños, es algo que puede darse en el aula y hacer que un estudiante se quede dormido en su escritorio. Además de interrumpir su proceso de aprendizaje, los profesores pueden ver eso como un problema de conducta.
Hiperactividad
Los problemas para dormir pueden exacerbar los síntomas del trastorno por déficit de atención e hiperatividad (TDAH).
Irritabilidad y estado de ánimo
La calidad del sueño se correlaciona con una regulación emocional saludable, lo que puede hacer que los niños y adolescentes que no logran dormir lo suficiente sean más propensos a estar más irritables o enfadados.
Agresión
Algunas investigaciones en niños han relacionado los problemas de sueño con un mayor riesgo de comportamiento agresivo, que puede ser especialmente preocupante cuando se combina con los efectos de la falta de sueño sobre el estado de ánimo.
Ansiedad y depresión
Tanto en adultos como en niños, la falta de sueño se ha visto asociada con un mayor riesgo de depresión y ansiedad, y estas condiciones pueden afectar directamente a la salud en general y al rendimiento escolar del niño.
El rendimiento académico también puede verse afectado por faltar al colegio. Los problemas para dormir se han relacionado con un mayor ausentismo o retrasos a la hora de llegar al colegio. Los factores de comportamiento pueden contribuir al tiempo perdido en el colegio, y la falta de sueño está relacionada con problemas físicos como letargo o dolores de cabeza, que pueden contribuir a las ausencias por enfermedad.
