¿Cada cuánto cambiar las sábanas?

Sep 14, 2019 | DORMITORIO, PRODUCTOS | 0 Comentarios

A la hora de dormir, la higiene es un aspecto muy importante, y el cambio de sábanas de la cama juega un papel crucial en este tema. Durante la noche, nuestro cuerpo transpira y suda, traspasando parte de ese aire y fluidos a las sábanas y el colchón. Además, el propio polvo del ambiente se va depositando en las telas, haciendo que la aparición de ácaros se acelere, con las claras consecuencias negativas para nuestra salud.

Son muchas las causas por las cuales las sábanas pueden ensuciarse (pelos, humedad, sudor, fluidos corporales, cremas, trozos de piel, etc.), y por lo tanto debemos cambiarlas a menudo para poder dormir sobre sábanas limpias, lo que proporciona gran confort e higiene.

 

Cada cuánto tiempo hay que cambiar las sábanas de una cama

 

El periodo ideal para cambiar las sábanas es de 3 a 4 días, lo que permite un tiempo suficiente para el lavado, secado, planchado y doblado del juego de sábanas de recambio. Además durante este corto periodo, las sábanas que se están utilizando no adquirirán un grado de suciedad que les impidan ser aptas para su uso.

Si se tienen mascotas en casa, los pelos y la habilidad de las mismas para subirse a las camas, hacen muy necesario que se cambien las sábanas y el resto de ropa de cama con frecuencia. En este periodo de 3 a 4 días para el cambio de sábanas, se da por sentado que durante el mismo, se realiza un correcto uso de las mismas, para evitar que se ensucien, como eludir el comer y beber en la cama, airear la habitación con las sábanas estiradas, no poner los pies con zapatos o calcetines encima de las sábanas, etc.

En las épocas de verano, donde el calor aprieta, es mejor reducir ese tiempo de cambio, incluso llegando al cambio diario si es necesario.

El lavado de las sábanas debe realizarse, por regla general y salvo que la etiqueta de las mismas indique lo contrario, con agua caliente que esté entre los 40 y 60 grados, para así acabar con las bacterias y ácaros, y que además facilite la limpieza de manchas.

En el caso de que se produzca algún incidente que ensucie las sábanas, como líquido vertido o incluso relaciones sexuales, deben cambiarse las sábanas sin respetar ese periodo de tiempo. También es importante cambiar las sábanas a diario si se está enfermo, ya que los virus y bacterias se pueden traspasar a las mismas.

 

Por qué utilizar un protector de colchón

 

Las sábanas no son aislantes, sino ropa de cama para mejorar nuestro confort y descanso. Por lo tanto, su función no es la de proteger al colchón de muchos de los agentes que pueden ensuciarlas, como sudor, fluidos, restos de cremas, maquillaje, etc. Por eso es recomendable utilizar un protector de colchón, como la funda de doble Tencel, que permita aislar el colchón de todos estos agentes externos. El Tencel es capaz de impermeabilizar el colchón aparte de dejarlo transpirar, siendo el único producto capaz de hacer ambas cosas a la vez. Con esta funda de doble Tencel, se dispone de dos capas de protección de este material, que refuerza la seguridad de nuestro colchón.

Al cambiar las sábanas estamos ganando en higiene y confort, aunque no estamos protegiendo el colchón con este cambio. Para protegerlo de forma adecuada, es necesario utilizar un protector de colchón que impida pasar todo aquello que las sábanas no pueden aislar.

 

Pasamos durmiendo al menos 8 horas al día, donde nuestro cuerpo descansa encima de las sábanas. Por lo tanto, éstas son parte importante de nuestra higiene y deben tener un cuidado adecuado y constante.