¿Es posible desinfectar tu colchón?
La forma de mantener nuestro colchón lo más higiénico posible es una cuestión que preocupa mucho a todos los usuarios, y especialmente a quienes tienen niños pequeños o algún familiar en casa con necesidades especiales y que pasa mucho tiempo en cama.
Son muchas las dudas que surgen al respecto: ¿se puede limpiar un colchón? ¿Cómo es más conveniente hacer la limpieza, en seco o en húmedo? ¿Es esto suficiente para desinfectar un colchón?
La higiene del colchón es fundamental
No se trata de un tema que debamos dejar pasar ya que una buena parte de nuestra vida la pasamos durmiendo, y por tanto haciendo uso del colchón.
De hecho, aunque no todas las personas lo saben, la realidad es que una mala rutina de higiene del colchón puede ocasionarnos las siguientes enfermedades:
Alergias
Y esto se debe principalmente a que los ácaros se vayan acumulando en el colchón día tras día. Si la alergia que nos producen va unida a otros problemas respiratorios como el asma, esta combinación puede derivar en problemas de salud más graves todavía.
Conjuntivitis
Los mismos ácaros que están en un colchón a consecuencia de la falta de una rutina de higiene pueden dañar los ojos de quien duerme en él.
Dermatitis
Los ácaros del polvo son de nuevo los que pueden estar detrás de esta conocida afección de la piel que causa una incómoda sensación de picor.
Y esto no es todo, y es que si no nos preocupamos por desinfectar el colchón, podemos sufrir eventualmente sarpullidos, dolor de cabeza o sensación de fatiga, todo ello por los ácaros del polvo, pues un único gramo de polvo puede contener hasta 10.000 de estos minúsculos insectos que se reproducen rápidamente en condiciones de humedad óptima.
Pero no son sólo los ácaros los que habitan un colchón, también hay bacterias y hongos causados por la propia humedad corporal, que impregnan el colchón, otro tipo de líquidos corporales, como la saliva e incluso restos de nuestras células muertas.
La rutina de higiene del colchón
Para desinfectar el colchón y mantenerlo libre de suciedad, el primer paso es establecer una rutina de limpieza sencilla pero efectiva y que se convierta realmente en algo habitual y no meramente puntual.
Estos son algunos pasos que podemos seguir para mantener el colchón limpio:
- Lavar la ropa de cama, como las sábanas, las fundas de almohada y las sábanas bajeras una vez a la semana a alta temperatura, entre 50ºC y 60ºC para higienizarlas por completo.
- Mantener una correcta higiene corporal y no entrar en la cama con los pies sucios o con el cuerpo empapado en sudor.
- Si accidentalmente se mancha un espacio pequeño del colchón, hay que limpiarlo inmediatamente frotando con un paño húmedo con agua fría y jabón y dejar que se seque al aire libre sin cubrirlo con la sábana hasta que no esté totalmente seco.
- Pasar la aspiradora por toda la superficie del colchón a máxima potencia para eliminar los ácaros y otros alérgenos.
- Proteger el colchón utilizando una funda protectora doble tencel.
Las fundas protectoras son la forma más sensata y segura de prevenir las infecciones en el colchón. Con ellas se consigue aislar el colchón del contacto directo con el cuerpo, protegiendo el colchón de los líquidos o fluidos que pudieran derramarse sobre él.
Además de ser impermeable, la funda protectora doble tencel es transpirable, por lo que permite que el calor salga y no se acumule el sudor.
La fibra Tencel es completamente de origen natural, cuidando el medio ambiente pero también la piel del ser humano, siendo suave y delicada, pudiéndose utilizar directamente como sábana bajera.